Mi nombre es Begoña.
Soy psicóloga, madre, hija, hermana, amiga…
Desde siempre he sentido curiosidad por el mundo infantil, por conocer el desarrollo cognitivo y emocional de los humanos.
Por eso, elegí estudiar Psicología.
Al acabar mis estudios me formé con una gran psicóloga, Guadalupe Gil Burmann y comencé a trabajar con niños y adolescentes desde una perspectiva cognitivo conductual.
Después vino un descanso, otros proyectos, más formación y vuelta a la psicología clínica donde me siento muy a gusto.
Me gusta abordar las cosas desde su parte más sencilla y me alejo del exceso de etiquetas que les ponemos a los niños, exigiéndoles tanto que a veces estallan. Igual que hacemos con nosotros mismos!
Nuestros hijos aprenden mucho de nosotros aunque no todo viene por lo que les enseñamos o viven en casa; ellos traen su propia energía y adn que les convierte en personas únicas.
Sabemos que el vínculo de apego que se establece entre el niño y sus progenitores influye en la manera de percibirse, en su capacidad para cuidarse, en las relaciones que va a establecer en su vida…
Por eso, mi manera de trabajar incluye a los padres y madres de los menores.
Pongo a vuestra disposición mi formación y mi experiencia para guiaros en este momento.
¿Empezamos?
Habilitada como Psicóloga Sanitaria