Por qué pega mi hijo pequeño

por qué pega mi hijo pequeño

Entorno a los 2 años casi todos los niños pasan por una fase de agresión,  más o menos acentuada según su temperamento, para dejarla atrás antes de cumplir los cinco.

Si tu hijo está en ese momento y muerde o pega con frecuencia a otros,  estate tranquilo, está en la fase de la autoafirmación y es pasajera.

Pero que sea una fase normal de su desarrollo no significa que debamos dejar que lo haga.

Al contrario, aunque nuestro niño nos parezca muy pequeño “no se da cuenta, pobre, es tan pequeño”, solemos pensar…No nos equivoquemos ya que desde que pasa a formar parte de nuestra vida estamos enseñando a nuestro hijo actitudes, ideas, creencias y formas de comportarse, tanto con nuestro ejemplo como con lo que les decimos.

Mi hijo pequeño pega: qué consecuencias tiene

¿Y qué pasa si con esta tierna edad dejamos pasar la oportunidad de enseñarle que no se pega?

Que se nos pasó el momento perfecto para enseñárselo  y él aprendió que pegar funciona: Con 5 años nos será más difícil y nos costará más esfuerzo enseñarle que pegar no vale.

Así que aprovechemos este momento para decirle con claridad y cariño lo que para nosotros está bien y lo que no, para ponerle límites.

CÓMO ENSEÑAR A TU HIJO PEQUEÑO A NO PEGAR

La mejor manera de ayudar a tu hijo de 2, 3, 4, 5 años a no pegar es decirle siempre que eso no te gusta, aclarar que ese comportamiento no lo aceptamos. Hacerlo siempre, con cariño pero con firmeza, todos los adultos de la casa.

Si te ha pegado o mordido puedes decirle: así no, eso no me gusta, no quiero que me pegues, me has hecho daño, no se hace, yo no te pego tampoco, así no tratamos a los que queremos, si quieres algo pídelo.

No importa que aún no domine el lenguaje, él o ella entienden lo que les decimos. Así que díselo las veces que pegue o muerda o empuje… ya estés delante o te lo cuenten.

Si ya sabe expresarse, indaga por qué lo ha hecho, trata que ponga nombre a su sentimiento. “Igual estás enfadado por algo ¿Me lo quieres contar? Parece que te has  enfadado porque no te he hecho caso a la primera”. Esto le ayuda a reconocer sus sentimientos.

Y después le enseñas el comportamiento alternativo a la agresión, el que sí sirve, lo que sí te gusta. Le cuentas cómo actuar de otra forma según la situación para que vaya aprendiendo que de forma agresiva no va a conseguir lo que quiere pero hay otras formas que sí funcionan.

Cómo responder ante conductas agresivas

 Tu hijo de tres años te da un mordisco

  • «No, no me gusta que me des un mordisco. Me has hecho daño y ahora me duele. Dime perdona, dame un beso para que se me pase, que no me gusta que pegues».
  • «El tambor es un instrumento de música y no una pelota. Si quieres jugar a lanzar cogemos una pelota y jugamos juntos”.

Tu hijo de 5  años pega en el cole

  • “La profe me ha dicho que hoy has pegado a Sonia… ¿Qué ha pasado?
  • Entonces escuchamos atentamente su respuesta, intentamos que exprese lo que lleve dentro y luego añadimos nuestra coletilla:
  • “A mí no me gusta que pegues…Y seguro que Sonia se ha quedado triste ¿Cómo podías haber hecho para conseguir lo que querías?”

Estos ejemplos pueden ser un punto de partida para hacer algo diferente. Con la práctica te saldrá de manera natural.

Cuidado si ya con 5 su comportamiento se parece mucho al de 3 años y no ha conseguido poner en práctica otras formas de hacerse entender, conseguir sus objetivos o solucionar problemas.

Te recomiendo que consultes con un psicólogo infantil si es así.

Si quieres contactar conmigo, seguro que podemos hacer algo para ayudarte.

Más ideas

5 sugerencias positivas frente a los niños que pegan o agreden. Padres ayudando a padres

Begoña de Torres-Peralta
Más en


Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies